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lunes, 21 de noviembre de 2016

RESEÑA RETIRO: VIVIR LAS BIENAVENTURANZAS



 Del 11 al 13 de noviembre la Fraternidad Velad y Orad impartimos el retiro VIVIR LAS BIENAVENTURANZAS, CAMINO DE FELICIDAD. 28 personas podíamos adentrarnos en el espíritu de las Bienaventuranzas. Dios siempre nos sorprende porque la verdadera felicidad que nos muestra Jesús no coincide con la que nos presenta el mundo. Como siempre nos sentimos tocados por el misterio de un amor que nos sobrepasa y que abre nuevos horizontes de vida. Coincidieron muchos de los participantes que ahora se llevaban trabajo para casa porque el Señor les había abierto los ojos. El silencio, la oración, la paz, el amor, la esperanza, se respiraba en el ambiente. Algunos que llegaron cansados de la vida, en parte rotos interiormente, salieron reconfortados, aliviados, ilusionados, con muchos deseos de trabajar algunos aspectos de su vida, deseos de conversión y de avanzar en el camino del amor. 




Pudimos contemplar a Maria nuestra Madre como la primera dichosa, feliz, bienaventurada. Solo Dios puede hacernos felices porque Él es nuestra alegría y felicidad, por eso le seguimos pidiendo un corazón pobre, limpio, manso, misericordioso, capaz de padecer a fin de que los demás descubran el camino de la salvación. Cuando el Señor toca el corazón los muros se caen y entra la gracia divina para dejar que Jesús actúe a través de nosotros. Es maravilloso ver cómo todos salimos más felices, mas llenos de Dios y con muchas ganas de transmitir la experiencia vivida. Doy gracias a Dios porque Él hace maravillas cuando le abrimos el corazón y porque todos los asistentes experimentamos lo mismo. Una bella lección fue aguantar las contrariedades de la vida elevándonos al cielo, allí junto ha María nuestra Madre en el corazón de la Santísima Trinidad. Subir cada día a ese lugar como «ciudadanos del cielo» a través de la oración nos devuelve la paz y la felicidad que Dios quiere para nosotros. Os animo a participar en estos retiros.


                                   Lázaro Albar

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