FELIZ NAVIDAD : ABRE TU PUERTA

ABRE TU PUERTA A LA NAVIDAD

Jesús llama a tu puerta,
ábrele tu corazón, quiere nacer en ti
porque trae la Navidad y la salvación.

Es allí en el lugar de tus tinieblas,
en tus oscuridades y pobreza,
en tu miseria y tu pecado
donde quiere nacer para llenarlo todo de luz,
entonces encontrarás la Navidad.

Y viene en el pobre, en el parado,
en el transeúnte y en el marginado,
en el que no tiene nada,
viene para mover tu generosidad,
tu solidaridad, tu compartir,
si les prestas ayuda
tú encontrarás la Navidad.

Pero también viene en el enfermo,
en el que se siente solo,
en el que no tiene a nadie,
en el que está perdido,
si sales a su encuentro
entonces habrá Navidad.

Hay tantos niños deslumbrados
por los juguetes y los regalos,
por las vacaciones del colegio,
por las luces destellantes de las calles y plazas,
pero si no hay contemplación del misterio,
si no besan al Niño en su pobreza y debilidad
no conocerán la Navidad.

Y es que en Navidad Jesús quiere llenar tu casa,
nacer en tu familia, en los padres, los hijos y los abuelos,
no solo que pongas el belén o el misterio,
no solo que adornes tu hogar,
el mejor adorno es la paz, el amor, la hospitalidad,
las cenas bendecidas, los encuentros orantes,
la acción de gracias, la bondad y la alegría.

Que no haya pobres en la tierra
porque donde nace Jesús, nace la vida,
se hace presente el evangelio,
llega la paz y la alegría de Dios,
la divinidad se hace humana,
la humildad se hace alfombra
para que toda rodilla caiga en adoración,
ya se escucha el coro de los ángeles,
ya suenan las melodías de Dios.

Hay Navidad donde brota la ilusión,
y con entusiasmo se comunica el Evangelio,
donde de nuevo se recupera la alegría
y en la sencillez y humildad se cultiva el amor,
donde el marido abraza a su esposa,
y hay abrazos para todos, del padre al hijo,
y de los hermanos entre sí,
siempre abrazos de amor.

Hay Navidad si hay perdón,
si los pueblos se reconcilian,
si ya nadie se pelea o regaña
porque reina la alegría y el gozo,
la justicia y el derecho,
y una estrella de paz se enciende
en la puerta de tu corazón.

Allí donde estés caes en adoración
como la mula y el buey ante su Creador,
como san José guardas silencio ante el misterio,
y como María das a luz al Salvador,
con tu vida y tus gestos, con tu cariño y ternura,
meditas en tu corazón.

Allí donde se espera un niño,
una nueva vida que amplía la familia
y Dios bendice con su amor,
se prepara una cuna y una habitación
y sobre todo se prepara la oración
para acoger lo que viene que viene de Dios,
porque es una sorpresa vivir lo inesperado de Dios.

Ya suena en el interior los ríos del Espíritu,
el agua transparente y clara de la misericordia
y los lagos de la compasión,
ya amanece la verdad y habla Dios
para ser acogido en tus hermanos,
en los jóvenes y en los niños,
en los pobres y los ancianos que buscan a Dios.

Hay Navidad si abres la puerta de tu corazón
a Jesús, el Niño Dios y Salvador,
que quiere llenar tu casa, tu hogar y tu interior,
nacer en tus entrañas el que te trae la vida,
música divina, coro de ángeles,
el cielo que viene a visitarte con sus mensajeros de paz
y allí estás tú envuelto en el misterio,
admirado y sorprendido ante tanto amor,
porque en la ciudad de Belén ha nacido un Salvador
y ese Belén es tu corazón, tu hogar o Iglesia,
Comunidad de vida que trae la salvación.

Sí, hoy en Belén ha nacido el Salvador
del mundo y de tu interior, para llenarlo todo,
y la paz florezca en el tierra con la buena noticia
de que Dios se ha hecho hombre para acampar
en tu interior y en medio del mundo
y ser destello de luz y tú te hagas misionero de su amor.

Sí, hoy hay Navidad si has abierto las puertas del corazón
a Jesús que te trae el silencio y la palabra,la gloria de la salvación,
si pisas la tierra de la humildad, del perdón y la comprensión,
entonces puedes gritar

¡FELIZ NAVIDAD 2014!
¡FELIZ BENDICIÓN! ¡FELIZ AMOR!

Lázaro Albar